
Es una plantta muy popular y fácil de cultivar. Prácticamente se puede encontrar durante todo el año a la venta en flor. Los cultivadores regulan las horas de luz diarias y provican la floración fuera de su estación normal. Existen numerosas variedades, con flores blancas, amarillas, anaranjadas, rojas o rosas. Se puede decir que está "muy trabajada". Pertenece a la Familia de las Crasuláceas, por tanto, se trata de una planta crasa y eso da muchas pistas de cómo hay que cuidarla. Admite el cultivo en el interior y, en climas cálidos, sin heladas, se puede tener todo el año plantada en el jardín, floreciendo desde enero a abril y refloreciendo en otoño.